MICROBIOTA ORAL:
La cavidad oral contiene diversos micro-ambientes donde habitan comunidades microbianas adaptadas a las condiciones específicas de cada uno de ellos.
En condiciones de salud, la microbiota presenta un estado de equilibrio (homeostasis) donde no se producen sustancias dañinas para los tejidos orales ni se rompe el euilibrio con el sistema inmune del hospedador.
Cuando se altera dicho equilibrio, por ejemplo, por factores externos como la dieta, se favorece el crecimientos de microorganismos con potencial patogénico (patobiontes), dando lugar a enfermedades orales como caries, periodontitis o halitosis. Aunque dichas enfermedades están causadas por microorganismos, no pueden considerarse infecciosas sino consecuencia de una disbiosis.
Dado que las enfermedades orales son claramente polimicrobianas, las estrategias antibacterianas como las vacunas pueden no ser efectivas. Por ello, los tratamientos con prebióticos y probióticos encaminados a restablecer el equilibrio microbiano y con el hospedador son las más prometedoras.
Fuente: «Probióticos, prebióticos y salud: Evidencia científica». SEP y P.